La angustia se da cuando falta la falta. Es decir, cuando el objeto a -es decir, el resto, es decir, lo que se perdió- se pierde y en el lugar donde no debería haber nada, aparece algo.
Bueno, quelqu'un m'a dit...
A veces me despierto en el trabajo pensando en que no te tengo. A veces pienso que ya no pienso en querer empezar a querer a alguna.
Juro que si Freud me invitara a un vaso de agua de coca, saldría huyendo... Freud, como todos saben, está muerto.
Prefiero la soledad que estar mucho tiempo con m... -¿represión?-
Hay veces que es insoportable estar en estas coordenadas específicas del plano espacio-tiempo. Hay veces que es imposible estar en estas coordenadas específicas del plano espacio-tiempo. Hay veces que es agradable estar en estas coordenadas específicas del plano espacio-tiempo.
Quiero aprender francés -me gusta la música francesa- y portugués -amo el bossa nova- y qué lástima que de carajillo nunca me dieron pelota cuando decía que quería tocar piano, aunque ahora lo que desearía sería aprender a tocar bandoneón -me encanta el tango-.
Veo más cercano aprender a bailar.
¡¡Juste encore une minute!!
Carajo, este año serán diez... y dije que no iban a ser.
"Ich liebe dich", jamás se lo he dicho a alguien en español... en francés y en inglés sí. Por eso fue tan fácil decirlo.
Una vez, estrangulando o estrangulado por el mouse de la computadora de la oficina me pregunté si la vida era esto, o si me había saltado un capítulo del manual de usuario.
Quiero un cigarro.
Mi primer recuerdo es de cuando tenía dos años o poquito menos, porque mi abuelo estaba vivo, todavía.
Mi último recuerdo es de la semana pasada. -le juro que no, no tengo episodios de despersonalización-
¿Le decía? Ah, por supuesto, I need someone to show me the things in life that I can't find.
Hay tanta gente en la calle miércoles santo es apenas un nombre y recuerdos de chiverre latas de penitencia es distinto el sol ahora que sólo se descubre tras una ventana te imaginás viajando o haciendo eso que nunca hiciste los gringos caminan con la esperanza de encontrar un pedacito de mar en la próxima intersección hacia el sur hay que tener buen gusto para vestir mal
es de esos días para pensar lo que ya no pasará
***
San José no deja de ser estrafalario aún en jueves santo un hombre con cara de penitente y sentado rumea ante un quiosco de cajeros automáticos quizá sus culpas hay más turistas que gente en la Avenida en los buses y la desolación sola de siempre es hoy más presente.
Ayer fue el Mundoloco. Festival de música en su cuarta edición, y tercero seguido al que asisto.
Las perspectivas:
14 horas de música
Chorrocientos grupos de distintas tendencias: árabe, lo flamenco, roots -¡puagh!-, electrónico con fusiones tribales e hindúes, celta, incluso este año la representanción de una fiesta tradicional, la Fiesta de los Diablitos, de uno de los pocos y miserables -por sus condiciones socioeconómicas- grupos indígenas que mal viven en este país "que no, aquí no hay indígenas, no somos Centroamérica...", y muchos ritmos más. Para este particular, la belleza total, un espacio que me pone a tres acordes del éxtasis cuando termina.
Un frío de la puta madre, porque esta vez lo hicieron en Cartago2.
Todas las birras que se puedan en tanto pueda seguir escuchando semidecentemente y bailando lo mal que ya de por sí bailo al ritmo de esas maravillas -carajo, que en este país hay muy buenos músicos y pésimos cantantes, excepto por Cantoamérica (música tropical); Las Tortugas (covers de rockcito setentero, sesentero y en muchísimo menor grado, ochentero); y Sonámbulo (tropical con rock)-.
Disfrutar con los amigos y buscar a alguna con quien bailar toda la noche.
La realidad:
El mapa para ubicarse, después de la mitad del trayecto no sirvió para nada, ningún punto de referencia se pudo encontrar luego.
Ya no era en Alajuela, que si bien es cierto era un poco incómodo para llegar y bastante frío, no lo era tanto como ese hueco donde lo hicieron -ahí de fijo hasta el diablo se perdía o se agüevaba1 llegando-.
La calle secundaria, de tercera, para llegar al lugar, angostísima, y en pésimo estado. Por consiguiente, una de presas.
La vista desde el parqueo más cercano al lugar era impresionante, bella, majestuosa de las lucecitas de casi tooodo el Valle Central3, lástima que estaba a buenos 10 minutos troleando4 -más o menos- de donde estaban las tarimas. Ese camino oscurísimo en algunos tramos, la vuelta fue una desgracia porque era en subida y sin ver un carajo.
Dos puntos donde lo cateaban -lo manoseaban, más bien, jejeje- a uno para evitar que se metiera birras, o comida o armas o mota5 al lugar... Que sólo servían para hacer presa y filas largas y espera inútil, porque aún así pude meter una cerveza sin que se dieran cuenta. Y el olor a ganja fue la constante, jejeje.
Filas para comprar cerveza. Filas para comprar comida -¡SOLO HABÍA UN LUGAR DONDE COMPRAR!, unos amigos duraron 45 minutos y la hicieron porque se morían de hambre-. ¡¡FILAS para los baños!! Por dicha uno como hombre puede sombrearse por ahí detrás de un arbolito... o el generador de electricidad por la tarima, como fue mi caso... jejejeje. Pero, ¿y las chavalas? Aguantarse un filón de la puta madre, buscar un lugar bien pero bien alejado o mearse encima.
El lugar lindísimo, vegetación a ambos lados y un espacio gigantesco para el montononón de gente que llegó. Pero perdido completamente.
Las entradas tres rojos6 más caras que el año anterior. Aunque la birra estaba a seis tejas7 lo cual estuvo decente.
Un desorden. Algunos buenos grupos tocaron iniciando la tarde, y poca gente los vio. El artista invitado principal un grupo inglés de roots, que hasta ahorita no tengo idea de dónde carajos salió. Según parece son muy famosos, a mí como del roots no paso del viejo Bob Marley, ni me inmuté. De los invitados internacionales yo iba por un tipo congolés, Badu N'Diaye, que el año pasado estuvo brutal y que toca los tambores como una deidad.
Hubo una representación de un grupo de teatro, creo, antes de que actuaran los compas de la Fiesta de los Diablitos... Una muy mala presentación, de paso, el audio se iba a cada rato. Fue ahí cuando mi paciencia y la de mis compañeros se acabó y me devolví a mi Alajuela querida, a las 11.30 de la noche estaba en mi choza -y eso que duramos más o menos hora y media de ese hueco a mi casa-.
Una decepción total.
Aunque, lo bueno:
Peregrino gris (celta) estuvo brutal.
Cardamomo (música árabe-flamenca) estuvo muy bueno.
Y Arábika... (música árabe con bailarinas de la danza del vientre) me enamoré por toda la eternidad que estuvo en el escenario, como el año pasado, de la chavala que salió vestida de blanco y las otras veces que salió vestida ya en un tono celeste o azul. Y estuvieron geniales además los músicos además. -Dato curioso, los músicos y las bailarinas son pertenecen a la misma familia, casi todos-
Santos y Zurdo (electrónica-hindú-tribal), buenísimos también.
Y el Ensamble Étnico, (electrónica-tribal) no lo ví. Un grupo que amo, y por cabreado que estaba no me digné a esperarlo. Pero gracias a la magia de interné, pude verlo. Vean un pedacito:
Imagínense, que no los ví, ni al congolés. Estaba terriblemente decepcionado.
2. Cartago: Nombre de una provincia de Costa Rica, y de la ciudad cabecera -que es muy fría y según la mayoría de la gente de las otras cabeceras, bastante aburrida-. Antigua capital colonial que según dicen, aún no se le baja eso de no ser más la capital. Hay quien bromea que el día que el equipo de fútbol de Cartago -que tiene como 60 ó 70 años sin ganar el campeonato nacional- vuelva a ser campeón una de dos: o se independiza de España o se independiza de Costa Rica. Nombres populares: Ciudad Triste, No Mundo, Cartucho, La ciudad/pronvincia de las Papas...
3. Valle Central: Valle o "depresión tectónica" según los que algo saben de eso, de suelos en su momento muy fértiles, con muchos ríos en su momento lindísimos, que contiene 4 de las 7 principales ciudades del país -recuerden que este país es pequeñito o pequeñitico, jejeje- y la zona más urbanizada y digamos, más desarrollada.
4. Troleando: Caminando
5. Mota: Marihuana
6. Tres rojos: Tres mil colones (un rojo: mil colones)
7. Seis tejas: Seiscientos colones (una teja: cien colones o cien unidades de algo) Tipo de cambio: un dólar equivale a un rango entre 489 y 509 colones, más o menos.
"Es fácil engañarse confiando en que los poemas que uno escribe se las arreglan para trenzar una cartografía fiel de lo que ha sido su vida, como si esperase que alguien al leerlos pudiera adivinar (o hacerse una idea de) qué clase de hombre es o fue y, leyendo esas páginas, adquiriera la convicción, tenue o nítida, de que ha llegado a conocerle. Pero una vez desaparecido el autor de un poema, nada de lo que fue perdurará en lo escrito -y en esta frase hay otra ingenuidad pomposa, pues no hace falta siquiera desaparecer para que esa presencia diluida en lo que fue escrito no pase de ser un fantasmal simulacro" (Juan Bonilla - Buzón Vacío)